
Pues bien, lo que pasa es que se estrena una obra de teatro en Australia en la que se presenta a un Jesucristo homosexual que es seducido por Judas.
En fin, reconozco que esto ya es pasarse no porque a mi me parezca mal, pero se lo podían haber ahorrado para no recibir amenazas de muerte por parte de fundamentalistas cristianos (todo un ejemplo de moderación).
Pero que daño hace una obra o una película; ¿respeto?. Si nos ponemos a hablar de respeto, no se quien respeta menos a quien...
Mas información sobre la obra en este enlace.
No hay comentarios:
Publicar un comentario